El salario medio anual, referido a todos los sectores, a jornada completa, se situó en 2021 en 25.383 euros, un 6 % más que el salario medio de 2019. Del análisis llevado a cabo en este informe se desprende, en general, que en los sectores incluidos en FeSMC-UGT se registran menores salarios y menores incrementos.

En Otros servicios, el salario medio, a jornada completa,  se quedó en el 78 % del salario medio nacional (19.815 euros de media anual). En este caso, la subida entre 2019 y 2021 fue tan sólo del 2,1%. Algo similar ocurre en los sectores de Comercio y Hostelería, donde el salario medio, para ambos, se quedó en un 83 % del salario medio nacional (21.003 euros) y la subida fue sólo del 1,2 % entre ambos años.

Sólo en dos agrupaciones sectoriales el salario medio se situó por encima de la media nacional: en Financiero/Seguros/Servicios profesionales y administrativos el salario medio supuso el 120,6 %, con un incremento respecto a 2019 del 7,8 %. Y en Transporte/Almacenamiento/Información y Comunicaciones alcanzó el 117,7 % del salario medio nacional, con una subida respecto a 2019 del 7,5 %.

La agrupación sectorial no permite analizar las diferencias sectoriales de forma más detallada pero señalan ámbitos de actividad con mayores dificultades para avanzar en una recuperación de la capacidad adquisitiva en los últimos años.

Lo realmente dramático es la elevada proporción de personas trabajadoras a tiempo parcial.

En 2019 un 22,6 % de las personas asalariadas de nuestra Federación trabajaba a tiempo parcial, prácticamente la misma que en 2021 (22,1 %). En el conjunto del resto de sectores la proporción llega desciende hasta el 8,5 % en 2021 (9,3 % en 2019).

Además, en el conjunto de las actividades incluidas en FeSMC-UGT hay un mayor número de personas con contratos a tiempo parcial de un número reducido de horas: un 20,2 % de las personas asalariadas trabajó menos de 30 horas semanales en 2021, con un salario medio bruto anual de 9.081 euros. En el total de sectores, esa cifra se queda en el 7,6 % y con un salario medio de 12.508 euros brutos anuales. Adicionalmente, un 16,9 % de las personas asalariadas, en el conjunto de las actividades de FeSMC-UGT, trabajaron entre 30 y 39 horas semanales; la proporción ascendió hasta el 39,3 % en el resto de los sectores. La mayor parte de las personas asalariadas trabajó 40 o más horas semanales; esa mayoría fue del 62,9 % en los sectores de FeSMC-UGT y del 55,2 % en el resto de los sectores.

Para todos los tramos de jornada el salario medio bruto anual en el conjunto de los sectores de FeSMC-UGT queda por debajo del resto de los sectores. La diferencia mayor se aprecia entre quienes trabajan entre 30 y 39 horas semanales. De media los trabajadores y trabajadoras del resto de los sectores cobran 31.693 euros. En los sectores de FeSMC-UGT la media se queda en 23.076, 8.817 euros menos. En este tramo horario se alcanza el valor más alto del salario medio en el resto de los sectores.

La mayor duración de la jornada anual y el uso intensivo de los contratos a tiempo parcial en el sector de servicios privados contribuye a una mayor pobreza salarial de las personas trabajadoras.

 No sólo hay una mayor proporción de personas que trabajan a tiempo parcial sino que, dado que el cómputo anual de la jornada es mayor, implica que una persona que trabaje entre 30 y 39 horas semanales en alguna de las actividades de FeSMC-UGT tenga una mayor probabilidad de hacerlo a tiempo parcial. En el resto de sectores la probabilidad de que fuera un contrato a jornada completa sería mayor.

De forma similar se observan claras diferencias en la remuneración de horarios atípicos. Un 50 % de las personas asalariadas a tiempo completo en alguna actividad incluida en FeSMC-UGT tiene una ordenación del tiempo de trabajo atípico, con un salario medio de 19.689 euros brutos anuales. En el resto de los sectores la proporción de personas asalariadas con ese tipo de ordenación de la jornada desciende hasta el 38,1 %, a las que les corresponde un salario medio de 28.249 euros brutos anuales.

El incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) durante estos años ha garantizado la mejora de las retribuciones de las personas con los salarios más bajos. De hecho, entre 2019 y 2021, en el total de los sectores, se ha incrementado en un 67,6 % el número de personas trabajadoras a tiempo completo que se han beneficiado de ese incremento. En FeSMC-UGT el porcentaje se queda en el 62 % debido al mayor alcance que tiene la jornada a tiempo parcial.  En una proyección simplificada, la subida del SMI en 2023 supone que en torno a 1.900.000 personas se verán beneficiadas por el incremento de este año hasta los 15.120 euros brutos anuales, de las cuales casi el 65 % trabaja en alguna actividad incluida en el ámbito de FeSMC-UGT. Estas cifras de potenciales beneficiarios implican también un incumplimiento en la aplicación del SMI.

Por otra parte, estos incrementos del SMI también benefician a las personas que trabajan a tiempo parcial que llega hasta el 43,4 % de las personas asalariadas en Otros Servicios y al 23,4 % en los sectores de Comercio y Hostelería. En total, aproximadamente 1.872.494 personas con jornada parcial se verán beneficiadas de estos incrementos del SMI en proporción al tiempo trabajado.

Un efecto de estos incrementos mayores del SMI que de los pactados en los convenios colectivos ha sido el recorte de las ganancias salariales entre categorías  próximas. Así ocurre entre la ocupación de Trabajadores cualificados de los servicios de restauración, comercio, en la que se encuadran dependientes, camareros/as, cocineros/as, vigilantes de seguridad, entre otros- y las personas con Ocupaciones elementales (auxiliares, ayudantes…). Estas dos ocupaciones acaparan el 38 % de las personas asalariadas en FeSMC-UGT. En ambas los incrementos salariales entre 2019 y 2021 son ridículos y se han desplomado las expectativas de mejora salarial por aumento de categoría: con un incremento entre ambas fechas del 0,2 % entre los Trabajadores cualificados (17.942 euros de salario medio en 2021) y del 0,8 % entre quienes tienen una ocupación elemental (17.153 euros de salario medio). No llega a mil euros de diferencia en el salario medio bruto anual. En el resto, crecen las diferencias salariales entre técnicos superiores y medios y los directivos se benefician de los mayores incrementos entre 2019 y 2021.

También crecen las diferencias salariales entre las personas trabajadoras más jóvenes y las de mayor edad; entre las personas que trabajan en pequeñas empresas y las que emplean a más de 250 personas; entre quienes cuentan con estudios básicos y los titulados superiores; entre quienes tienen contrato temporal e indefinido y entre los hombres y las mujeres.

Sin embargo, la evolución de los salarios entre 2019 y 2021 ha dado lugar a un descenso de la diferencia salarial entre personas trabajadoras con nacionalidad extranjera y nacionalidad española.

En cuanto a las diferencias salariales entre los territorios, Madrid (con 28.044 euros), País Vasco (27.483 euros), Navarra (25.474 euros) y Cataluña (27.484 euros)  encabezan la cuantía del coste salarial por persona trabajadora y año. Todas ellas experimentan un crecimiento en 2021 respecto a 2019, especialmente Madrid (4,6 % más) y Cataluña (3,4 %).

En el extremo opuesto, con los costes salariales más bajos en 2019, estaban Murcia (20.359 euros), Canarias (19.726 euros) y Extremadura (19.195 euros). Dos años después el coste salarial ha subido en Murcia un 7 % (la mayor subida de todo el territorio nacional). Canarias experimenta una reducción del coste salarial del 3,7 % y Extremadura tan sólo sube un 1,3 %.