El 10 de octubre a las 10:30 dio comienzo la tercera reunión de la mesa de negociación del convenio estatal de empresas de seguridad.
Esta mañana se celebró telemáticamente la tercera reunión de la Comisión Negociadora del Convenio Colectivo Estatal de Seguridad Privada para el 2027 en adelante, con la participación de las organizaciones empresariales APROSER, ASECOPS y FES, y las organizaciones sindicales FeSMC-UGT, CCOO del Hábitat, FTSP-USO, CIG y ELA.
Durante la sesión, las patronales insistieron en los aumentos de costes que afrontan las empresas —entre ellos, permisos retribuidos, absentismo e incapacidades temporales— y defendieron la necesidad de modernizar el marco del sector, simplificar pluses y garantizar seguridad jurídica. APROSER propuso una vigencia de cuatro años (2027-2030) con incrementos salariales del 3% anual, alcanzando un 12% acumulado, y mantener un marco estable tras los aumentos del convenio 2023-2026.
Por su parte, las organizaciones sindicales coincidieron en que el debate debe centrarse en mejorar las condiciones laborales y salariales, no en reducir derechos.
- UGT rechazó calificar los derechos como costes, defendió los nuevos permisos y propuso incorporar nuevas categorías tecnológicas.
- CCOO del Hábitat reclamó un convenio ambicioso que dignifique el sector, con mejoras en conciliación, jornada y retribución.
- USO planteó medidas concretas para reducir la alta incidencia de bajas por IT mediante la limitación de jornadas y rotaciones en servicios de alta presión.
- CIG y ELA rechazaron la propuesta salarial de la patronal por insuficiente y exigieron subidas más elevadas, reducción de jornada a 35 horas semanales, mejoras en los pluses y mayor equiparación de derechos, además de avanzar hacia convenios autonómicos en Galicia y Euskadi.
FeSMC-UGT señala inicialmente que más allá de escuchar a las organizaciones empresariales, está en la Mesa para negociar el convenio y, desde el respeto y la lógica discrepancia, traslada sus planteamientos.
Señala que su organización sigue trabajar en elaborar una plataforma conjunta para la próxima reunión. Continúa afirmando que rechaza que se califiquen como “costes” lo que son derechos y respalda, por ejemplo, la ampliación del permiso por fallecimiento (con apoyo de UGT).
«Cuando se recortaron derechos y se impuso una reforma laboral sin consenso, la parte empresarial de la Mesa guardó silencio; entiendo la preocupación por los costes, pero nosotros venimos a hablar de derechos». Diego Giráldez.
Considera asimismo imprescindible incorporar al convenio nuevas ocupaciones vinculadas a la tecnología —operadores de drones, gestores de seguridad tecnológica y otras funciones adscritas a empresas tecnológicas— hoy con escasa regulación.
Señala a continuación que la vigencia del convenio dependerá de los logros alcanzados. En materia de pluses, no procede agruparlos; incluso podría crearse algún plus específico y mejorar los existentes. Afirma igualmente que no aceptará cambios en IT que reduzcan derechos: ese debate, de darse, es intersectorial y con matices distintos.
Sobre la falta de vigilantes, sostiene que no se traerá personal de fuera de España con las actuales tasas de desempleo. El problema es de retención: jornadas excesivas, rotaciones y cambios indiscriminados de cuadrantes empujan a abandonar el sector.
En relación a que la reducción de jornada debe abordarse en la negociación colectiva y, en el ámbito de la seguridad, si no se legisla, su aplicación resulta casi imposible. Bienvenida vía convenio o, en su caso, mediante norma que obligue a quienes se resisten a dicho proceso.
Considera necesario tratar la subrogación, especialmente en transporte de fondos. Asimismo, tampoco se opone a situar al personal tecnológico bajo el paraguas del convenio.
UGT habría querido debatir en la mesa prevista en el convenio actual que, finalmente no se abrió, el transporte de fondos, pero esto no debe usarse para dilatar la negociación del próximo convenio; y las propuestas sobre ese subsector han de abordarse en la mesa específica comprometida para diseñar el futuro del sector de forma global.
Agradece que se haya aterrizado la propuesta económica a 4 años con un 3% de incremento y, más allá de fijar la plataforma conjunta, valorará lo hablado, si bien entiende que en un convenio a cuatro años debería aspirarse a más ambición.
La próxima reunión de la Mesa Negociadora se celebrará el 20 de octubre de 2025, donde las organizaciones sindicales prevén presentar una plataforma conjunta que recoja las principales reivindicaciones del colectivo.
