El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), principal accionista de CaixaBank, ha recibido una carta de la Sección Sindical de UGT en la entidad en la que se solicita que vote en contra del aumento salarial del Consejero Delegado en la próxima Junta General de Accionistas. El sindicato considera que esta subida es desproporcionada en un contexto de deterioro de las condiciones laborales de la plantilla.
La Sección Sindical de UGT en CaixaBank ha enviado una carta formal al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), accionista de referencia de la entidad, solicitando su voto en contra del punto 6º del orden del día de la próxima Junta General de Accionistas, convocada para el 11 de abril. Este punto propone un nuevo incremento en la retribución del Consejero Delegado de la entidad, que supondría una subida del 14,9% sobre el total de sus retribuciones, siendo el incremento de su bonus variable del 46,8%.
Desde UGT denunciamos la falta de proporcionalidad y coherencia de esta propuesta en un contexto donde las condiciones laborales de la plantilla se han deteriorado gravemente: la sobrecarga de trabajo, la falta de refuerzos, la presión comercial extrema y el incumplimiento sistemático de acuerdos laborales han marcado la realidad cotidiana en CaixaBank.
Fruto de esta situación, la Inspección de Trabajo impuso recientemente a la entidad una sanción por infracción grave en materia de prevención de riesgos laborales, al constatar el incumplimiento de las medidas psicosociales requeridas. A pesar del esfuerzo de la plantilla, la Dirección continúa ignorando sus demandas: ni se han abordado las medidas de conciliación comprometidas, ni se han negociado protocolos de traslado o permuta, ni se ha garantizado el respeto a los derechos más básicos.
El Consejero Delegado ha visto aumentada su retribución en un 74,15% desde 2020, y actualmente percibe 52 veces más que la media del personal. Esta tendencia rompe con cualquier principio de equidad y con los compromisos asumidos en materia de sostenibilidad e igualdad, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente el ODS 10 sobre reducción de desigualdades.
Desde UGT instamos al FROB a ejercer su responsabilidad institucional votando en contra de una propuesta que profundiza la desigualdad, perpetúa los privilegios de una minoría y socava los valores de responsabilidad social corporativa que la entidad proclama defender.
La plantilla merece respeto, reconocimiento y un reparto justo de los recursos. Desde UGT seguiremos alzando la voz en todos los foros para denunciar estos abusos y reclamar una gestión ética, sostenible y humana.