Hoy, el Comité Sectorial de UGT ha evaluado de forma conjunta los preacuerdos alcanzados, tanto para el III Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas, como para el despido colectivo iniciado por la compañía. Tras una evaluación detallada, UGT ha llegado a la conclusión de que, en el contexto global en el que nos encontramos, los avances alcanzados merecen una valoración positiva en su conjunto y, por tanto, deben ser suscritos.

Como sindicato mayoritario en Telefónica, recae sobre esta organización la responsabilidad de proteger tanto al colectivo de la plantilla que permanecerá en la compañía y con quien nos comprometimos de forma franca y pública a blindar y avanzar en sus condiciones laborales, como a aquellas compañeras y compañeros que eventualmente puedan verse afectados por el actual proceso de despidos y con quienes tenemos el deber de asegurar tanto su estabilidad económica, como su acceso futuro a la jubilación.

Por ello, UGT no puede obviar que los progresos logrados en estas semanas de negociación se producen en un marco caracterizado por un complejo contexto social, económico, político, sectorial y accionarial y que resulta imperativo abordar las cuestiones que afectan al sector de las telecomunicaciones con una mirada crítica y reflexiva.

No en vano, en repetidas ocasiones, desde UGT hemos subrayado la incertidumbre que prevalece en nuestro sector. Escenario al que en las últimas semanas se han sumado otros factores, como la entrada de nuevos actores en el accionariado, desde la irrupción de capital extranjero hasta la ya anunciada adquisición estatal del 10% de las acciones a través de la SEPI.

Así, poniendo en valor el esfuerzo conjunto y la negociación constructiva realizada hasta ahora, que nos ha permitido superar puntos de partida inasumibles, reducir las pretensiones de la empresa ante el excedente funcional inicialmente presentado, lograr unas condiciones de salida semejantes a los planes precedentes, mantener intactas las principales garantías de la plantilla, incluyendo la revisión salarial vinculada a IPC, blindar derechos como la progresión profesional y la antigüedad y avanzar en nuevas conquistas sociales como la jornada laboral de 36 horas, la póliza de reembolso dental universal, la ampliación del teletrabajo o la deslocalización, hacen que evaluemos estos preacuerdos como los más favorables dentro del sector, ofreciendo no solo estabilidad laboral y garantías de futuro, sino también un compromiso tangible con el bienestar de la plantilla.

En UGT entendemos que debemos actuar con sensatez y firmeza para salvaguardar los derechos de todas las personas trabajadoras y, por ello, exigimos a la empresa que actúe con la misma responsabilidad que asumimos desde nuestra organización, para que estos acuerdos vayan acompañados de una apuesta firme por la creación de empleo, la mejora del plan social, la internalización, el reskilling y el mantenimiento del empleo en todas las provincias.

Así, demandamos a la empresa que mejore el plan de creación de empleo vinculado a las extinciones planteadas y se comprometa asimismo a mejorar el premio de fidelidad del plan de prensiones para aquellos compañeros cuya relación con la compañía finalice en los próximos meses tras el proceso de despidos colectivos. Desde UGT velaremos durante todo el proceso del despido colectivo, realizando un seguimiento de la adscripción para garantizar que se cumplan las condiciones económicas acordadas en todas las salidas y se respete la premisa de buscar la voluntariedad.