El Ágora Sindical de UGT está siendo lo que pretendía, un punto de encuentro para los representantes de los trabajadores, de las empresas y del Gobierno. Este es, sin duda, su mayor éxito pues ha logrado congregar a más de 600 asistentes en el salón de actos de la madrileña sede de UGT en Avenida de América.

Antonio Oviedo, Secretario General de la federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT,  tras dar la bienvenida a todos los presentes, ha cedido la palabra al Secretario General de la Unión General de Trabajadores y Trabajadoras, Pepe Álvarez, quien ha iniciado su discurso pidiendo al Gobierno que se revise la ley de contratos del Estado y la Ley de Desindexación que afecta, de pleno, a los trabajadores y trabajadoras de los Servicios y a las empresas del sector.

Balance positivo

Si bien es cierto que sindicatos como UGT han logrado que se subroguen, a través de la negociación colectiva, a muchos trabajadores de estas empresas que prestan servicios a la Administración pública, no parece suficiente. «Es muy importante que esta cuestión se revise para mejorar las condiciones de los profesionales de los servicios privados», ha señalado.

No obstante, el Secretario General de UGT ha pedido un ejercicio de memoria: «¿En qué situación estábamos los trabajadores de los servicios privados hace cinco años y en qué situación están hoy?», se preguntaba Álvarez. Es bueno que seamos conscientes de esto porque, a pesar de todo los sucedido en estos años en forma de crisis, «el avance de las condiciones de los trabajadores en este país es muy positivo».

Sin feminismo no hay democracia

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha empezado su intervención dando las gracias a la Unión General de Trabajadores «por haber contribuido a que en esta legislatura hayamos podido generar más empleo estable que nunca, más estabilidad y derechos para los trabajadores y las trabajadoras, mejor calidad de vida para los jóvenes, para las personas pensionistas y, sobre todo, para las mujeres, con una visión feminista. Porque sin feminismo no hay democracia», ha dicho.

Además, Montero ha señalado que es importante «recordar a la ciudadanía que la respuesta neoliberal que protagonizó el Partido Popular fue a costa de una devaluación interna tanto de la clase media como de la clase trabajadora de este país». En este sentido, y volviendo al presente, la ministra de Hacienda ha denunciado «la ola de catastrofismo que se ha instalado en algunos relatos interesados y que no se sustenta en ningún dato. No hay informes ni evidencias que avalen ese discurso catastrofista de la derecha que sólo se sustenta en la mentira».