La empresa ARCHI con sede en Marbella adquirió en el mes de abril la división de acudas a la Mercantil INV VIGILANCIA.

En la compra realizada subrogo a los vigilantes de seguridad que venían realizando sus funciones en la anterior empresa personas trabajadoras que ya desde el inicio de la relación laboral tuvieron distintos problemas entre otros de uniformidad, así como de abono de sus respectivas nominas por parte de ARCHI.

El pasado 17 de julio la empresa unilateralmente decide dar de baja de seguridad social y a espaldas de las mismas, a las personas trabajadoras subrogadas en la operación de compra, así como con en recientes fechas ha indicado engañosamente a los vigilantes de seguridad que serán subrogados en sus servicios por la empresa INV SISTEMAS, ambas situaciones faltan a la verdad y son jurídicamente inciertas.

ARCHI con esta decisión fruto de una mala gestión de compra o bien por una manifiesta incapacidad operativa pretende con esta actuación camuflar lo que jurídicamente pasaría por un escenario de ERE o bien por un despido improcedente en toda regla, pretendiendo dejar a las personas trabajadoras en el desamparado más absoluto y que para UGT pudiera estar vulnerando el propio Derecho al trabajo digno situado en nuestro país y avalado por la OIT.

Esta situación desde el conjunto del Sindicato ha sido puesta en conocimiento de las inspecciones de trabajo, respectivos juzgados, como también se está valorando la posibilidad de iniciar actuaciones penales contra la actuación de la propia Mercantil.

UGT sigue insistiendo en las distintas administraciones de este país en la necesidad de avanzar hacia un cambio de modelo de empresas de seguridad privada en el territorio nacional, empresas que operan sobre una actividad esencial realizada desde la profesionalidad por el conjunto de vigilantes del sector siendo estos atropellados en sus derechos más esenciales por un número de empresas que deben dejar de operar en esta actividad laboral.