El día 15 de diciembre, ha finalizado el proceso de firma del III CONVENIO COLECTIVO DE LA INDUSTRIA DE LA PRODUCCIÓN AUDIOVISUAL (TÉCNICOS), entre la Patronal y dos de los 4 sindicatos que formaban parte de la mesa negociadora: CCOO y CSIF. No se ha tenido en cuenta, por tanto, a casi el 50 % de las personas trabajadoras del sector representadas en la mesa de negociación por UGT y CGT. UGT, se ha mantenido firme durante toda la negociación del convenio para garantizar que la regulación de la jornada mejorara la actual situación de todas las personas trabajadoras del sector, garantizando la conciliación de su vida laboral, personal y familiar.
El resultado final de esta negociación ha supuesto todo lo contrario: hacer de la jornada de trabajo una gran bolsa de horas a disposición de los empresarios, disfrazada de preavisos y de supuestos excepcionales, que aportan poca seguridad jurídica a la persona trabajadora. De hecho, la totalidad del texto es una amalgama de contradicciones que admiten lo que en principio parece no permitir. Se establece la jornada semanal en 40 horas frente a las 35 horas de trabajo efectivo de promedio anual hasta ahora vigente.
Para ello, se suma el complemento de disponibilidad al salario base permitiendo que las nuevas contrataciones a 35 horas se conviertan, de facto, en contrataciones a tiempo parcial. Igualmente, las personas trabajadoras que en la actualidad vienen desarrollando una jornada de 35 horas, aunque se les reconoce la condición de personas trabajadoras a jornada completa, solo perciben el salario base (que con la nueva regulación incluye el antiguo plus de disponibilidad) y el plus de flexibilidad, en proporción a la jornada de 35 horas sobre la nueva de 40 horas.
Desde UGT se manifestó, en todo momento, que era indispensable reconocerles la condición de personas trabajadoras a jornada completa sin reducción del salario base y del plus flexibilidad. Se cambia el cómputo bisemanal de la jornada por otro mensual, de forma que se permite trabajar hasta 198 horas al mes, todo ello consecuencia de la distribución irregular que este nuevo texto permite para todas las personas trabajadoras que decidan no renunciar al plus de flexibilidad.
Se permiten bajo unas supuestas circunstancias especiales que, a nuestro modo de ver y dada la redacción y las características de la prestación del servicio pueden producirse con excesiva frecuencia, jornadas de hasta 12 horas de trabajo efectivo durante 3 días consecutivos en la semana (incluso 4 días para los procesos productivos ordinarios y previsibles de cine o ficción). Para justificar esta nueva regulación de la jornada, se crea un plus compensable y absorbible que ampara también la distribución irregular de la jornada denominado FLEXIBILIDAD dotado de 120 euros, supuestamente voluntario. Igualmente, aquellas jornadas que excedan de 9 horas de trabajo efectivo tan solo se ven recompensadas con un pago de un complemento de jornada especial de 20 euros diario por trabajador/a los tres primeros días y 55 € para el caso de que se realicen estos excesos de jornadas un cuarto día. Cabe destacar que este complemento se abona en el mismo importe se trabaje de manera efectiva más de 9 horas o hasta 12 horas.
UGT ha defendido durante la negociación que este complemento de flexibilidad no fuera compensable y absorbible, para así garantizar que este incremento de la jornada semanal, así como posibles situaciones especiales, se tradujeran realmente en mejoras económicas para los trabajadores y las trabajadoras del sector, siendo desatendidas nuestras reivindicaciones. Desde UGT no entendemos que dos sindicatos, CCOO y CSIF, hayan firmado un convenio colectivo que lesiona tan gravemente los derechos de las personas trabajadoras, y que contempla unos salarios que siguen siendo bajos como consecuencia de la aplicación de unos incrementos salariales escasos.
Desde nuestro punto de vista, se ha permitido una desregulación total de la jornada laboral y del tiempo de trabajo, permitiendo jornadas de hasta 12 h. durante 3 o 4 días a la semana. Todo ello, bajo el amparo de unos supuestos controles de registro de jornada, horarios y calendarios que, dada su regulación, hacen fácil a las empresas no cumplirlos. UGT tomará todas las medidas legales a su alcance para evitar la aplicación de este convenio que, a todas luces, perjudica gravemente los derechos de las personas trabajadoras del sector.