Más temporales y precarios que nunca

Como siempre en junio, el paro se reduce por razones estacionales. No se está creando empleo, sino subempleo o “infraempleo”.

En el mes de junio el paro registrado en los Servicios Públicos de Empleo se ha vuelto a reducir, como sucede siempre en este mes. Porque el mes de junio es uno de los mejores meses del año para el empleo, de modo que siempre se reduce el paro en este mes debido a factores estacionales, esencialmente por las contrataciones relacionadas con el sector del turismo y las temporadas vacacionales.

Bienvenido sea el aumento del empleo y la reducción del paro, porque la tasa española de paro sigue siendo la segunda más alta de toda la Unión Europea (18,7%), tras Grecia.

Pero los datos del mes de junio también han vuelto a poner de relieve que las empresas españolas están obsesionadas con hacer solo contratos temporales. A pesar de que llevamos tres años con crecimiento del PIB y que sus beneficios ya han superado los que tenían antes de la crisis, no están aumentando sus plantillas de manera estable. Abusan de la contratación temporal como no se hace en ningún país de Europa, la mayoría de las veces en clara situación de fraude. Y también pasa con el tiempo parcial. 

Por eso no es exagerado decir que no se está creando empleo, sino subempleo o “infraempleo”.

Además, las prestaciones por desempleo están bajo mínimos, y apenas cubren a la mitad de quienes no tienen empleo.

Por todo ello, crece la actividad económica y los beneficios de las empresas, pero no mejoran las condiciones laborales y de vida de los trabajadores y trabajadoras. Se reduce el paro, pero no la pobreza y las desigualdades.

Es preciso cambiar nuestro modelo laboral para que se cree fundamentalmente empleo estable. Para eso:

  • Hay que comenzar derogando las últimas reformas laborales.

  • Es necesario que la inspección de trabajo extreme la vigilancia sobre las condiciones de contratación y trabajo para evitar el fraude y la explotación laboral, y de manera muy especial sobre las jornadas laborales.

  • Hay que reforzar el sistema de prestaciones por desempleo, incorporando simultáneamente una prestación de ingresos mínimos para garantizar un suelo de rentas de subsistencia, tal y como hemos planteado UGT y CCOO.

  • Y hay que reformar el sistema de políticas activas de empleo, eliminando la mayoría de las subvenciones y bonificaciones a la contratación, ineficaces y costosas, y construyendo un nuevo modelo que ponga el acento en la formación, la orientación y la intermediación laborales.

En suma, necesitamos un Plan de Choque por el Empleo, que incluya todas esas medidas.