CIG, CCOO y SITA firman un convenio nefasto en AUDASA

En el día de hoy, los trabajadores de la mayor concesionaria de autopistas de Galicia tendrán peores condiciones laborales gracias a la connivencia existente entre la empresa, AUDASA, y los sindicatos que, en conjunto, ostentan la mayoría; CIG, CCOO y SITA.

AUDASA, con la colaboración inestimable de los sindicatos CIG, CCOO y SITA (mayoría, con 6 miembros en el comité intercentros), firman un convenio con pérdida de poder adquisitivo y recorte de derechos con la oposición de UGT, que posee 4 miembros en el citado comité.

UGT no ha podido impedir que los trabajadores de la concesionaria de autopistas pierdan condiciones laborales y, para ello, ha sido necesaria la coalición de CIG, CCOO y SITA, y la empresa, claro está. De esta forma se ha podido completar la receta que elabora este caldo de recortes a la plantilla, y que se ha venido cocinando desde hace varios meses. Tan solo faltaba que los sindicatos firmantes dieran un paso al frente y afrontaran el SI al recorte de derechos. Han hecho falta varios meses para que tuviesen el valor, y finalmente se corroboró con la firma del preacuerdo que la empresa, con la fuerza que da ser empresa (sobran las palabras), ayudó a defender en las asambleas al unísono con los sindicatos firmantes, actuando ambos en contra del interés colectivo. Una minoría, defendiendo las ideas de UGT, se alzó con fuerza para tratar de defender el NO, y casi se consigue, faltó muy poco, pero no pudo ser.

El segundo acto de «valentía» tuvo lugar en el día de hoy, cuando se firma definitivamente el texto final del convenio.

Dicho texto, entre otras perlas, sostiene:

  •         Creación de una nueva categoría profesional, con un salario muy inferior, que abre la puerta a la empresa a un abaratamiento del salario y propicia que, “a igual trabajo, no hay igual sueldo”.
  •         Supuesto incremento salarial y parcialmente consolidable (si, parcialmente consolidable, ya que se cobra una sola vez), puesto que la mayor parte va en función de objetivos e incrementos de tráfico (IMD) que deben darse y que, en todo caso, siempre serían consolidables cantidades inferiores al IPC, por lo que los trabajadores de AUDASA pierden poder adquisitivo año a año.
  •         Reparto desigual de supuesto incremento del convenio, el cual va a parar a una sola categoría de no más de 10 trabajadores, en detrimento de otros colectivos como los cobradores de peaje, nuevo personal de mantenimiento (con nueva categoría con salario más bajo), personal de oficina, etc…, está claro que las cantidades que van para unos, no puede subírsele a otros. Esto no es negociación colectiva.

Y estos son los 3 aspectos más importantes del convenio, de los cuales 2 fueron introducidos a petición de la empresa. La parte social solo consigue una subida salarial, consolidable en parte, y que, en todo caso, siempre consolidará por debajo del IPC. No hace falta hacer muchos números para atisbar una cierta dejadez en la negociación, lo que provoca un resultado pésimo.

Como ya había pasado un año desde la finalización del convenio, como no, parte de las presiones que se esgrimieron para la firma del texto final giraron en torno a la pérdida de la utraactividad, lo que podría propiciar que la empresa aplicaría peores condiciones laborales, incluyendo la pérdida de determinados derechos como los gastos médicos y otras ayudas. Sin embargo, resulta chocante que los firmantes sigan dejando la puerta abierta a tales presiones en próximos convenios, y dejen sin cerrar algo tan sencillo y fácil de escribir como “el presente convenio mantendrá su contenido normativo hasta que se firme uno nuevo que lo sustituya”. En la próxima negociación, vendremos con idénticas presiones emanadas de los mismos jugadores.

AUDASA y los sindicatos firmantes, bogando en la misma dirección, han firmado un nuevo convenio, cuando UGT pretendía seguir negociando y conseguir mejoras en la mesa de negociación, sin enfrentamientos bélicos que algunos utilizaron para crear el pánico. Parece mentira que la experiencia de otros convenios, en los cuales se siguió negociando y consiguiendo mejoras, no hicieran aflorar el sentido común.

UGT seguirá luchando por los intereses colectivos de toda la plantilla de personal en Audasa sin plazos, sin presiones, sin miedos y, sobre todo, sin complicidad con la empresa. Creemos firmemente que, sin someter a las trabajadores y trabajadores a fuentes de conflicto, se podría haber firmado un convenio mucho mejor.